miércoles, 18 de marzo de 2009

Ciudadano Barbacid


Suelo leer las entrevistas empezando por las preguntas. Quiero decir, que si me interesan las preguntas me adentro en las respuestas. A veces, cuestiones interesantes reciben respuestas simples, pero rara vez preguntas tontas tienen respuestas que merezcan la pena. En cualquier caso, es mi manera particular de abordar una entrevista que no deja de ser una pequeña relación con principio, nudo y desenlace entre dos personas. Hace unas semanas un suplemento dominical de gran tirada -XLSemanal- abrió su número 1.109 con una entrevista al oncólogo Mariano Barbacid, una de las autoridades mundiales en esta enfermedad. Las nueve páginas de entrevista me gustaron. Me pareció divulgativa, entretenida con suficiente información para saber algo más del cáncer, conocer al profesional y a la persona. Cuenta cosas interesantes y tanto el reportaje fotográfico como las informaciones adicionales están bien cuidadas. Hasta aquí bien por la revista.
Pero, hete aquí que dos números más tarde, o sea quince días después -y tras alegrarme la vista con la portada de Hugh Jackman- me da por echar un vistazo a las cartas al director o 'Correo' como denonima el suplemento a esta sección. El caso es que en la parte baja de una página par a una columna y en 31 líneas, el propio Barbacid reniega de esta entrevista por haberla realizado de un modo engañoso por parte del periodista.
Ya sé que en prensa se suele decir que 'perro no come carne de perro', pero no es menos cierto que estas actitudes a quien menos benefician son a los propios periodistas. Barbacid quería una entrevista por escrito, de las de cuestionario, de esas que no nos gustan nada a los periodistas porque si algo hay importante en una entrevista es estar frente a frente y con los ojos bien abiertos. Una entrevista es mucho más que una serie de preguntas y respuestas. Manos, gestos, ambientes, lugares deben dar tanta o más información que el entrevistado. Yo diría que a pesar del entrevistado porque hay matices que no se pueden controlar. Un cuestionario es antiperiodístico aunque pedir aclaraciones al cuestionario, mantener una conversación de media hora y utilizar sólo esa media hora sin avisar a tu entrevistado...pues tampoco es que sea muy periodístico. En este punto, mal por la revista. Supongo que por una, perderá muchas. Desconozco las razones del periodista o del medio para saltarse las condiciones de Barbacid pero sí sé que este tipo de acciones quiebra la confianza entre medios y ciudadanos (al final, Barbacid no es más que un ciudadano) y ahonda en esa creencia injusta de que no importan las personas, sólo las noticias. Para el que quiera leer la entrevista y la carta íntegra de protesta de Barbacid, ahí va el enlace. Cada cual que saque sus conclusiones.

Nota: la fotografía de este artículo ha sido tomada de elpais.com

1 comentario:

JLeoncioG dijo...

LAs entrevistas por correo son un peligro, y distan mucho de lo que es buen periodismo. Éste nace de la comunicación, y en las respuestas a un cuestionario no hay 'feedback' no hay comunicación. Los científicos son mucho de respuestas por correo, porque hablan mucho y luego se arrepienten de lo que dicen, y lo más fácil es echarle la culpa al periodista. En muchas como esta me he visto yo...